Arquima participó, el pasado miércoles 21, en una Jornada organizada por el GBCe (Green Building Council España) sobre prefabricación y construcción sostenible, dentro del ciclo “Sustentable y Sostenible con GBCe”, celebrada en la Galería de Materiales del Colegio de Arquitectos de Madrid (MATCOAM).
El delegado de Arquima en Madrid, Fernando San Hipólito, arquitecto, ingeniero de Edificación, Máster en Estructuras y Técnico de Ejecución (Tradesperson) del Passive House Institute, acudió en representación de la industrialización en madera y expuso en una conferencia las ventajas del sistema Arquima desde el punto de vista de la sostenibilidad. Un sistema que ofrece una alternativa respetuosa con el medio ambiente, con la salud de las personas y es energéticamente eficiente para reducir el exceso de emisiones de CO2 en el planeta.
Las envolventes de los edificios se realizan completamente en la fábrica de ARQUIMA y se transportan los módulos en 2D en camiones hasta el lugar del montaje, donde, con la ayuda de una grúa se monta de manera rápida y limpia. Como las paredes llevan ya integradas las carpinterías exteriores y el revestimiento de fachada, el montaje es muy rápido y además la obra no necesita andamios y apenas genera residuos.
La construcción industrializada necesita un grado de perfección muy superior a la construcción “in situ” para evitar cualquier posibilidad de error en la fase de montaje, ya que tiene un margen de error y corrección más complejo y dificultoso durante el ensamblaje en obra de todas sus piezas previamente construidas en taller, es por ello, que necesita la ayuda de herramientas de diseño con un grado de tecnología importante.
Arquima trabaja con Cadwork, una tecnología CAD/CAM de última generación y con más de 30 años de existencia en distintos países a nivel mundial, y en especial para la construcción de estructuras de madera. Mediante esta tecnología BIM, se puede garantizar una continuidad para todas las fases del proyecto, desde el diseño hasta la producción; con gran flexibilidad y fácil manejo.
Este tipo de edificaciones aportan más rapidez de ejecución, más confort térmico y más calidad del aire interior. El coste económico constructivo puede ser ligeramente superior al de la construcción tradicional, pero se amortiza en pocos años ya que su ahorro energético es de hasta un 90% respecto a las construcciones tradicionales.
El plazo de ejecución puede llegar a reducir en un 50% el plazo de una obra tradicional, y esto, en sectores como el hotelero o el de los promotores inmobiliarios, puede generar muchos beneficios.
El tipo de madera utilizado por Arquima para las envolventes de los edificios es el abeto KVH certificado y sólo utiliza materiales con una mínima huella de carbono, como la madera de bosques gestionados de manera sostenible y certificados con sellos PEFC (Programme for endorsement of Forest Certification Schemes) y FSC® (Forest Stewardship Council).
Junto con otros expertos en industrialización, Fernando San Hipólito participó también en la mesa debate posterior a las ponencias, que resultó muy participativa y despertó gran interés entre los numerosos asistentes.